El eurocentrismo cultural y las falsas emociones universales

El eurocentrismo cultural y las falsas emociones universales

¿Es posible que lo que la propaganda eurocéntrica nos vende en la televisión como emociones básicas universales aplicables a todos los humanos sea también una propaganda política? Es posible, como todo hay que animarse a analizarlo hasta el hueso y desprendernos de nuestros prejuicios culturales.

Algo de eso aparece en esta nota sobre la vinculación de la sonrisa facial con la emoción de la alegría y la maquinaria publicitaria detrás de ella:

“La industria de la felicidad mueve millones de euros y parte de que la sonrisa está detrás de la felicidad”, afirma Fernández Dols, en referencia a la maquinaria internacional de cursos, libros de autoayuda y otras formas de charlatanería. “Las expresiones faciales son estrategias interactivas. Los niños, cuando se caen, solo lloran cuando ven a su madre”, sostiene el psicólogo.

La unificación de las expresiones culturales según el patrón eurocéntrico tiene la capacidad de hacernos olvidar las múltiples formas emocionales que han sido barridas durante la conquista «civilizadora» del mundo junto con las culturas que las expresaban:

“El concepto de emoción básica es popular, pero no necesariamente científico”, opina Fernández Dols. El psicólogo recuerda que un reciente libro, The Book of Human Emotions, de la historiadora británica Tiffany Watt Smith, describe 156 emociones diferentes, como el awumbuk, una palabra de la cultura Baining de Papúa Nueva Guinea que se refiere a la sensación de vacío que dejan los invitados al irse. «En psicología empleamos el vocabulario de la calle. Es como si en física utilizaran palabras de la calle para estudiar la mecánica newtoniana. La gente quiere Inside Out, pero la realidad, a lo mejor, es otra».

Vale la pena leer la nota completa.